La etapa final de Claremont y Larroca, recopilada en un tomo destinado a las librerías generalistas. Una apuesta arriesgada para entrar en el mercado del cómic de superhéroes
Ficha Título Original:Fantastic Four, vol. 3 nos 24 - 34 Autores: Chrish Claremont - John Moore (guión) Salvador Larroca (lápices) Colección: Best Sellers nº 707 Editorial: Ediciones DeBolsillo Nº de Páginas: 272 págs. Precio: 14,95 €
Este recopilatorio es el segundo intento por parte de Random House Mondadori, dentro de su sello DeBolsillo para publicar cómics Marvel en asociación con Panini Comics. Y cabe decir que este segundo intento es más afortunado que el realizado con el recopilatorio dedicado a Ghost Rider, pues al menos los materiales seleccionados para este tomo tienen algo más de calidad.
La etapa escogida corresponde con las dos últimas sagas que escribió Chris Claremont mientras estuvo al frente de los guiones de Fantastic Four post Heroes Reborn. Estos cómics fueron escritos en una época en la que Claremont ya estaba viviendo de las glorias pasadas de su magnífica etapa en La Patrulla X, pero eso no quiere decir que hiciera un mal trabajo en Los 4 Fantásticos. Lo que ocurre es que el resultado quedó a años luz de lo esperado por la historia de los personajes y por lo que se esperaba de un guionista de la talla de Claremont, pues las historias que escribió no pasarán a la historia por su falta de grandeza y en algunos números se hace patente lo innecesario de los largos diálogos y cuadros de texto de apoyo que usa desde siempre el guionista.
Aunque si algo reluce en el paso de Claremont por esta colección es cómo construyó la personalidad de Susan Richards, que en eso si hace recordar a sus seguidores los mejores momentos que tuvo en su paso por la franquicia mutante.
Por otro lado, los números de "relleno" escritos por John Moore incluidos al final del tomo resultan más sólidos y entretenidos que los realizados por Claremont.
Y los dibujos de Salvador Larroca son lo que terminan salvando el tomo, demostrando el autor valenciano su gran talento, pese a estar en muchas viñetas oculto por los colorines plastificados con que suele trabajar Liquid!
Para finalizar sólo queda por decir que la edición de este tomo no es del todo mala, aunque los editores sí podrían haber incluido algún que otro artículo introductorio sobre los autores o la etapa en cuestión.