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Si pensamos, al menos en un primer momento, el primer personaje que nos vendría sería el Castigador pero seguramente si dejamos ir un poco más la mente nos vendría otro, un héroe pero que no es como los demás, me estoy refiriendo a Daredevil; dos personajes terriblemente parecidos pero totalmente distintos.
El Vengador.
La historia del Castigador, o Frank Castle hace ya muchos años, es bien conocida por los lectores de cómic. Militar y policía que decidió “morir” cuando su familia fue asesinada para convertirse en un justiciero que termina con la vida de los criminales; como decía uno de los antiguos anuncios de cómics Forum “Si eres culpable, estás muerto”.
La primera vez que vimos a este personaje en acción fue en la serie del trepamuros engañado por el Chacal se enfrentaba con el protagonista, pero la popularidad que tuvo lo convirtieron en un personaje recurrente del universo Marvel que aparecería en distintos títulos además de tener el suyo propio ocasionalmente.
A lo largo del tiempo ha sufrido muchos cambios, pero supongo que el más relevante fue el morir de verdad y regresar entre los vivos convertido literalmente en un ángel vengador.
El Guardián.
Realmente no sabía si poner custodio o guardián pero creo que este último es más adecuado.
Matt Murdock creció sin madre (aunque más tarde la encontraría) y fue criado por su padre, un viejo boxeador que volvió al ring. Durante su infancia sufrió un accidente evitando que un camión atropellara a un anciano, con tal mala suerte que transportaba bidones con residuos radiactivos que provocaron que se quedara ciego pero incrementaron todos sus sentidos.
El joven abogado se entrenó junto a Stick hasta llegar a ser un atleta olímpico y lograr que nada se asustara, se convirtió en un hombre sin miedo.
Su camino se ha cruzado con infinidad de personajes desde Spider-Man del que es amigo, los vengadores, la viuda negra con quien compartió (y a veces sigue compartiendo) un romance y por supuesto con el otro ángel que ocupa este texto.
La lucha.
A pesar que estos dos héroes (o antihéroes como hemos dicho antes) comparten un pasado trágico, ya que sus familias murieron a manos de criminales, y dedican su vida a proteger a quienes no pueden hacerlo siempre han tenido una relación casi de amor odio ya que, aunque se respetan como compañeros, tienen un gran punto que los mantendrá enfrentados de por vida… El castigador mata, Daredevil no.
Desde el punto de vista de Castle todos los criminales son culpables y deben morir, por el contrario el abogado ciego intenta que se haga justicia de un modo o de otro, en los tribunales o como el justicieron vestido de rojo.
Otro punto en común de estos dos personajes es su carácter religioso; como se ha podido ver en bastantes cómics los dos son creyentes y comulgan con la fe cristiana pero también es cierto que en más de una ocasión han tenido que ir en contra de los preceptos de la misma.
La elección.
Existe un cómic (que personalmente me encanta) en el que estos personajes y su lucha se ve totalmente clara en una simple elección “Matar o dejar que siga matando”.
La que toma cada día el Castigador
La que debe decidir si tomar Daredevil.
El tebeo al que me refiero es Marvel Knights Punisher vol.1 Número 3; en esta historia vemos como Castle está tras la pista de un mafioso llamado Gnucci y llega a la conclusión que el mejor momento para atacar es al término del primer juicio, el problema es que ha contratado a Nelson y Murdock pero existe una pequeña complicación, en palabras del Castigador “el verdadero problema es Matt Murdock… y el ángel guardián que le sigue a todas partes” nos referimos, claro, a Daredevil.
Así es como dos páginas nos encontramos con el Castigador en un tejado preparado para acabar con Gnucci cuando aparece Daredevil para impedirlo pero no quiere pelear, intenta dialogar con el vengador
“Si pudieras darte cuenta de que puedes elegir…”
“Me sé tus discursos de memoria. Pégame”
Entonces si empiezan a pelear pero el Castigador, como el mismo piensa, no tiene ninguna oportunidad contra el diablo pero ha venido preparado y lo derriba gracias a un altavoz ultrasónico que afectan a los supersentidos de Daredevil haciendo que pierda la consciencia.
Al rato el antiguamente Dan Defensor en España despierta atado con cadenas, sin poder moverse y con una pistola pegada con cinta a su mano derecha con una sola bala, Castle se sitúa delante y le dice que la única forma de impedir que mate al mafioso es que termine con su vida.
“Es hora de que hagas esa elección de la que me hablabas”.
Daredevil tiene una bala, una sola oportunidad de impedir que el Castigador mate pero para ello deberá ir en contra de todo lo que ha defendido en su vida.
Los firmantes.
No voy a extenderme en este punto, pero solo indicaros que a los lápices tenemos a Steve Dillon con tintas de Jimmy Palmiotti y en el guión al siempre interesante Garth Ennis.
“Con sus ángeles, el libra la batalla victoriosa contra Satanás y los ángeles rebeldes”
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