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Hola. Esta persona está por prescripción médica bajo los cuidados de una marioneta. Por favor, trátelo como haría normalmente, pero diríjase a la marioneta.
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| Sinopsis | “El castor (The beaver)” cuenta la historia de un hombre inmerso en un viaje para redescubrir a su familia y reanudar su vida. Acosado por sus propios demonios, Walter Black fue en otro tiempo un ejecutivo de éxito de la industria juguetera y un hombre de familia, pero ahora sufre una grave depresión. Intente lo que intente, Walter no parece encontrar nada que le permita retomar el rumbo de su vida, hasta que irrumpe en ella una marioneta con forma de castor.
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| Crítica | 
Puntuación
del crítico: 8 |
No sabía muy bien que esperar de este “El Castor”, solo porque no había más estrenos atrayentes por la acaparación de salas del estreno de “Piratas del Caribe” la semana pasada y porque realmente me gusta Jodie Foster y me parece una mujer muy interesante e inteligente, y sabía que me iba a encontrar con algo mínimamente decente, decidí meterme a ver “El Castor”. Como resultado mis amigos y yo salimos con una sonrisa en la boca diciendo que nos había gustado más de lo esperado.
Con un argumento bastante peculiar, “El Castor” es una propuesta bastante original y arriesgada que podía salir bien parada o mal parada. Como película la cosa ha salido bastante bien parada, pero al público no le ha llamado la atención ya que su protagonista, Mel Gibson, sobre todo en los USA, ha bajado de popularidad enormemente a causa de unos desafortunados comentarios antisemitas y racistas, creando así un fuerte odio anti Gibson. Ya vimos como el actor de súper taquillazos como “La pasión de Cristo” pinchaba en taquilla el año pasado con su thriller “Al límite”, y este año la cosa se ha agudizado con “El Castor” por los fuertes insultos y maltratos a su ex-mujer. Dejando aparte los escándalos del señor Gibson, sería injusto no reconocer el gran trabajo que ha realizado en la película, creando un personaje complejo y humano que hace que te olvides de todo lo que haya hecho Gibson en el pasado, haciendo que te quites el sombrero ante él.
Jodie Foster se pone por segunda vez delante y detrás de las cámaras al mismo tiempo después de “El pequeño Tate” en 1991, y su tercera película como directora tras “A casa por vacaciones” en 1995. En esta ocasión destaca más por su labor detrás de las cámaras que delante, ya que aunque esta correcta como casi siempre (ya que en otras ocasiones esta magistral), aquí queda a la sombra por la gran interpretación de Mel Gibson, e incluso por la de su hijo en la película, Anton Yelchin, al que dentro de poco veremos en el remake de “Noche de miedo”.
Una película diferente que logra transmitir distintos estados de ánimos, desde la risa hasta la más profunda tristeza, dos géneros que Foster ha logrado mezclar a la perfección. Y es que “El castor” es mucho más que una película que sirva como transporte para el perdón de Gibson por el público como se la ha intentado vender. Creo que merece la pena darle una oportunidad, por lo menos a mí me ha encantado.
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Chema | | |
Ficha de Película enviada por Jack Skeleton el 28 de Mayo de 2011 |
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