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Escrita por Brett Easton Ellis, uno de los máximos exponentes de la llamada "Generación Beat", en el año 1991, American Psycho narra la vida de un ejecutivo, Patrick Bateman, joven, millonario, atractivo, narcisista, hipócrita y aburrido. Fanático de Whitney Houston, Huey Lewis & The News y Génesis, Bateman se mueve en un mundo tan falso como él; los grandes empresarios apenas se conocen entre si, y las críticas por la espalda son el pan de cada día.
Bateman está tan vacío por dentro como sus compañeros, e intenta llenar este vacio de una manera peculiar: matando. Lleva ya más de 50 víctimas, a las que no solo mata, sinó que tortura, mutila y practica con ellas mil y una perversiones. Esta es la imagen oscura de Patrick, que poco a poco durante el libro se irá descontrolando, voviéndose cada día más cruel y sádico y rompiendo cada vez más los lazos que le separan de la locura absoluta. Como él mismo dice, "me parece que estoy perdiendo la máscara de la cordura...".
Mucho es lo que ya se ha dicho de American Psycho. Lo cierto es que había razón para tanta polémica, pues esta novela es una de las críticas más feroces que un escritor norteamericano ha hecho a su propio país y a una sociedad autocomplaciente y orgullosa de sí misma. Para su denuncia el autor ha escogido un camino arriesgado: Patick Bateman no es un rebelde ni un paria; Patrick se mueve por las calles de Nueva York como se supone que debería hacerlo cualquier joven de éxito, y sin embargo es un hombre capaz de violar, torturar y asesinar. Patrick mata y almuerza con la misma soltura y eso, más aún que la crudeza con la que Easton Ellis relata las matanzas, es lo que más nos incomoda, pues de pronto descubrimos que ese mundo de las formas donde estamos condenados a vivir ha creado una moral "otra", sin signos de distinción que permitan detectar al nuevo outsider. American Psycho es de alguna forma el complemento oscuro de La Hoguera de las Vanidades, ya que descubre los puntos negros de la vida de los supuestos triunfadores que la novela de Tom Wolfe quiso obviar. Es más, estos puntos negros son escondidos por los otros triunfadores que, lejos de creer que uno de los suyos pueda hacer algo así, proporcionan un manto de protección alrededor del asesino para evitar que la imagen del alto standing quede dañada.
La manera de narrar de Easton Ellis es también un punto que hay que resaltar. Este libro no empieza con el primer asesinato, sinó que nos muestra la vida de Bateman, y ya solo por sus costumbres cotidianas normales se convierte en un personaje odioso. Es solo más adelante cuando el lector se da cuenta que Bateman ya lleva una larga y sangrienta carrera, con muchas muertes a la espalda. Aparte, la locura de Bateman va en aumento, y eso lo refleja el autor perfectamente en la descripcción de los asesinatos, siendo estos cada vez más complejos y brutales, llegando a matar un niño e incluso a su novia (personas que, por supuesto, le importan un pimiento).
En resumen, uno de los mejores libros que se han escrito en los 90, y en mi opinión el más notable de todos ellos, recomendable a cualquiera que tenga ganas de ver más allá de los simples hechos, a cualquiera que crea que, como decían en Hamlet, "algo huele a podrido" en nuestra sociedad.
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