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| Portada del Uncanny X-Men #444 | |
Vuelve Chris Claremont a la serie que lo vio ‘crecer’. El cómic que hizo que miles de generaciones lloraran gracias a sus intensas historias.
Aunque Claremont ya volviera años atrás con una etapa que duraría menos de diez números, donde veríamos un montón de argumentos donde el lector se perdía. Claremont había cambiado su modo de ver los mutantes y eso no gusto demasiado al público que reclamaba las historias clásicas que hicieron famoso al autor. Quesada había preparado una gran revolución en el dominio de la ‘X’, y para no cometer más errores como en el pasado le concedió a Claremont su nueva serie regular junto con Salvador Barroca. En el nuevo título veríamos a los personajes más queridos de Claremont, en su sabor más clasicista. Pero X-Treme X-Men, el nuevo título mensual de X-Men fue cayendo en el Top-10 a causa del abandono (involuntario) de Larroca y en parte también fue por el dibujo más deslucido de Igor Kordey.
Pero a lo largo del año pasado, Quesada habló de devolver el tono clasicista de toda la vida justo después de la marcha de Morrison. Por ello empezó una nueva revolución denominada con el nombre de ‘RELOAD’. Esta nueva dirección para los títulos-X iba a estar encabezada por Claremont que volvería a Uncanny. Pero para ello se vio obligado a cerrar X-Treme X-Men en su número #46, así acababa una de las pocas series que habían durado tanto, además de que era la tercera serie mutante. Pero Claremont conseguía así volver a Uncanny X-Men por todo lo grande y crear un nuevo título, ‘Excalibur’ donde veríamos al Profesor Xavier reconstruir Genosha.
Uncanny X-Men se lee como la verdadera y única continuación de X-Treme X-Men, aunque en el equipo nos encontramos con Rondador Nocturno y nos despedimos de Pícara y Gambito que se pasan a X-Men. Para empezar una nueva etapa nada mejor que un partido de baseball, donde vemos a todos los X-Men pasándoselo a lo grande. Aunque Claremont también nos deja entrever un sub-argumento que puede dar mucho de que hablar, y es que Rachel no esta muy contenta de que su papaíto se haya liado con Emma (a la que odia a muerte). Este cómic como bien he indicado antes es solo la presentación del equipo y nos adelanta más o menos la dirección que tomará la colección. Tormenta, Bishop, Sabia, Rachel, Rondador Nocturno, Sam y Lobezno serán parte del X-S-E la policía mutante a la que perteneció Bishop en su futuro. Una idea muy interesante que la sabe desarrollar Claremont. Además de que por lo que sabemos sobre los acontecimientos que tienen que pasar…aún tenemos que ver, a Claremont tratando con la Furia (personaje creado por Moore y Davis en Excalibur). También veremos de por medio a Siniestro. Pero si tenemos que resumir este número en una sola frase sería: ‘Una vuelta a la raíces de los X-Men de siempre’.
El dibujo de Davis también ayuda mucho, y es que se nota que Davis ha venido con ganas de X-Men. Me encanta sus diseños, aunque el traje de Bala de Cañón deja que desear, menos mal que solo lo veremos durante la primera saga por que desaparecerá para unirse de nuevo a X-Force. Un número muy recomendable y que no defraudara a nadie, y al fin vuelve un Claremont reconocible y no aquel que vino en su anterior etapa en Uncanny X-Men.
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